Mi mochila. Esa que llevo puesta y me acompaña.
Mi historia personal, todas las experiencias que he vivido a lo largo de mi recorrido, con la carga emocional que ello conlleva.
Las personas que han llenado esa mochila han sido muchas, unas con más cosas y otras con menos.
La familia ha dejado en mí una huella imborrable, es la seña más potente de mi identidad. También ha participado la escuela, con todos sus maestros, aquellos que recuerdo más por lo que me hicieron sentir que por lo que me enseñaron.
Pienso en todas esas personas y en como fui acompañada. No olvido que ellos también estuvieron social y culturalmente influidos y que también llevaron a cuestas el peso de su propia mochila.
Sé que quisieron darme lo mejor y hacerlo lo mejor que sabían. Se esforzaron por ser “buenos padres” y también “buenos maestros.”
Solo por acompañarme les pongo en valor.
Estas aquí y ahora para acompañar a la infancia. Te escuchas, te revisas y te preguntas.
¿Qué cosas de las que llevas en tu mochila quieres que sigan aflorando en los niños y niñas? ¿Cuáles, de aquellas que, aunque tú acogiste en su día, hoy con lo que eres y con lo que, honestamente, sabes quieres cambiar?
Sin juicios, haces tu nuevo equipaje. Sabes de tu responsabilidad.
Te dejarán y dejarás huella y también recordarás y serás recordada.
Con la misma pretensión, dar lo mejor de ti misma y hacerlo lo mejor que sabes, lo mejor que puedes. Y empiezas el camino con tu nueva maleta, pero sin perder de vista tu vieja mochila.
Te escuchas para escuchar
Te miras para mirar
Te observas para observar
Te das valor para poner valor
Te válidas para validar
Te respetas para respetar
Te cuidas para cuidar
Te acoges para acoger
Tomas consciencia para que tomen consciencia
Te sientes presente para dar presencia
Te permites para permitir
Te envuelves para dar envoltura
Te (con)sientes para (Con)sentir
Te empoderas para empoderar
Vas sin prisa para dar tiempo
Te silencias para dar silencio
Te das voz y das voz
Te pones palabras y pones palabras
Eres tú sostén, sostendrás y también serás sostenida.
Te sientes capaz, sientes al otro como capaz
Confías en ti para dar confianza
Estas limitada, también limitarás
Te sientes disponible para dar disponibilidad
Conectada contigo misma para conectar con los demás
Te amas y das amor
En calma parar calmar
Te acompañas para ACOMPAÑAR
Acompañar es acariciar con el alma, desde el más profundo respeto y admiración por cada ser. Con cariño, con amor.